El pasado sábado nos vimos las caras con un rival que conocemos más que bien. Ya nos enfrentamos a ellos en cuatro ocasiones la temporada pasada (con balance 3-1 a nuestro favor), y la verdad que se está convirtiendo en un partido especial para ambos conjuntos.
El equipo visitante ha mejorado su equipo respecto a la temporada pasada con algunos jugadores de segundo año, lo que añadido a la mejora de varios de sus chicos de primer año le convierten en un rival más que peligroso.
Navalmoral, sorprendentemente, comenzó el partido defendiendo en individual. El partido, pese a ser igualado, se iba decantando poco a poco de nuestro lado. En el minuto 5 apareció la ya habitual zona 2-3 que tanto nos cuesta atacar en ocasiones, y que vino para no irse. A esto se le añadieron las tempraneras faltas a Nico y Pérez (ya pasa de mera casualidad la fijación con las faltas a estos jugadores de algún que otro árbitro) que les sacaron completamente del partido. Para colmo, y con el equipo arriba en el marcador, Jesús se lesionaba en la espalda a mediados del primer periodo, para no poder volver a jugar hasta la segunda parte (parcial de -14 en ese espacio temporal) y perdiendo en ese tiempo completamente la lucha por el rebote defensivo.
No fue nuestro mejor día, lo que se demuestra con las más de 30 pérdidas acumuladas y con el 31% de acierto en TL. Pese a no jugar bien, al equipo no le falta esfuerzo. Defendimos bien a unos muy buenos jugadores, y los pudimos quedar en tan sólo 54 puntos, lo que no es sencillo.
Pese a nuestro nefasto ataque por momentos (miedo a tirar, miedo a atacar el aro, multitud de pérdidas y bajísimos porcentajes), llegamos a los minutos finales con opciones. En los últimos 4 minutos de partido encadenamos un 1/10 en TL que mató por completo nuestras opciones de victoria.
Felicitar al equipo de Navalmoral, que en esta ocasión impuso su ritmo de juego y ganó el partido merecidamente.
Por nuestra parte, a aprender de los errores para afrontar el próximo partido de liga, el sábado a las 10:00 en la Universidad contra Adepla. No podemos permitirnos perder porque está en juego asegurar la segunda posición del grupo. A mirar hacia delante, y a jugar con más alegría.
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